Reflexión del Plan de Igualdad

23.03.2011 15:53

Las chicas a diferencia de los chicos tienen una tasa superior de colocación y promoción superior. Esta diferencia es debido a las culturas y la educación. Se debe educar desde una educación integral, aquella que inculca valores como la responsabilidad, autonomía, cuidado, respecto y cuidado a los demás.
Los chicos van abandonando los estudios poco a poco, pero con esto no queremos decir que no estudien es mas muchos poseen estudios universitarios. En los estudios universitarios, los chicos estudian ingenierías, tecnología, internacional, mecánica. En cambio las chicas estudian sanidad, imagen, educación, administración, humanidades. Por así decirlo los chicos estudian lo más práctico. Es como un estereotipo los chicos estudian esto y las chicas lo otro. No debería ser así, si no estudiar lo que nos guste y que haya diversidad en el trabajo. Por ejemplo al haber más docentes mujeres proporciona modelos no deseables a la división de tareas en sexos.
Con respecto al comportamiento, los chicos son más agresivos que las chicas. En el aula, los chicos son más violentos y más destructivos. A los niños no se les debería de educar desde la posición de que el niño es más fuerte que la niña. Mucha de la culpa la tienen los padres al estereotipar a los niños y no educarlos desde una igualdad en todo.
En la docencia, en los sistemas de jefatura abundan más los hombres que las mujeres. Siendo los hombres directores del centros y jefes de estudio. Quizás las mujeres no acceden a ese puesto alto en la docencia a causa de la responsabilidad en casa. Cosa que no vemos bien porque la casa y los hijos son tanto del hombre como de la mujer. Que deberían de repartírselo entre ambos. Pero las mujeres abundan más en los cargos de responsabilidad y gestión. Debido a ello, las mujeres participan en actividades formativas, proyectos de innovación e investigación educativa. Hay un índice inferior al de coordinadoras que de coordinadores. Es un síntoma de la tradicional identificación de lo masculino con lo técnico y de lo femenino con las humanidades.
Las candidaturas y representación de mujeres y hombres en los Consejos Escolares. El porcentaje de candidatas a la elección es superior al de candidatos en todos los sectores de la Comunidad Educativa. Sin embargo, las mujeres son elegidas en una menor proporción.

Los objetivos del plan de Igualdad es: promover práctica educativas igualitarias, facilitar el conocimiento de las diferencias entre los sexos, corregir el desequilibrio de responsabilidades entre el profesorado y promover cambios en las relaciones de género.

El 2 de Noviembre de 2005, del Consejo de Gobierno, aprueba el I Plan de Igualdad entre Hombres y Mujeres en Educación. En la Constitución Española se recoge el derecho de los españoles y las españolas la igualdad efectiva, reconociendo que todos y todas somos iguales ante la ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión o circunstancias personales o sociales. En la Comunidad Europea identifica la igualdad entre hombres y mujeres como uno de los principios fundamentales de la Unión Europea, intentado que en el gobierno exista la igualdad entre hombres y mujeres. En el
Estatuto de Autonomía para Andalucía establece que promoverá las condiciones para que la libertad y la igualdad sean reales y, particularmente, siendo consciente de las diferencias culturales que producen desigualdades por razón de sexo, regula como principio relevante la igualdad efectiva del hombre y la mujer, promoviendo la plena incorporación de las mujeres a la vida social superando cualquier discriminación laboral, cultural, económica o política.
La propuesta de la Consejera de Educación, con informes favorables de las Consejerías de Economía y Hacienda y de Justicia y Administración Pública, y el Consejo de Gobierno, todo ello se reunió el día 2 de Noviembre de 2005, con lo cual se creó el Plan de Igualdad.

Anexos
La igualdad entre el hombre y la mujer sigue hoy por hoy siendo todo un objetivo. Las desigualdades se dan en cambios sociales, tecnológicos, económicos… La mujer a evolucionado mucho en las últimas décadas en ser como el hombre y que el hombre sea como la mujer. La mujer estudia y entra en el mercado laboral, lo cual antes no era así, sino que la mujer no estudiaba solo se dedicaba a sacar en adelante su casa.
Las mujeres sufren violencia y puede ser consecuencia de la vida que llevan ahora las mujeres en comparación con la de años atrás.
La mujer aunque aceda al mercado laboral, sigue la discriminación con el salario, que es menor al del hombre. El papel del hombre, ya era hora de que cambiara, toma un valor en la familia no solo aportando dinero. La mujer también es fuente de ingresos.
La igualdad entre mujeres y hombre es una igualdad formal y debemos convertirla en igualdad real. Teniendo las mismas oportunidades de realización personal y social, compartiendo responsabilidades familiares, laborales y de poder.

Las mujeres como ciudadanas deben de ser libres a la hora de decidir y ejercer papeles políticos y sociales. Siempre se ha educado de distinta manera a las niñas que a los niños. A las niñas se les enseñaba las labores de la casa. En cambio a partir del siglo XX, las niñas estudiaban e iban subiendo de nivel académico.
En la escuela se deberían de enseñar unos saberes de la vida domestica y el cuidado de las personas en ambos sexos.
Los principios de actuación son: visibilidad, transversalidad y inclusión.
Objetivos:
1. Facilitar un mayor conocimiento de las diferencias entre niños y niñas, hombres y mujeres, que permita evitar y corregir las discriminaciones que de aquellas se derivan, así como favorecer las relaciones basadas en el reconocimiento y la libertad de elección.
2. Promover condiciones escolares que favorezcan prácticas educativas correctoras de estereotipos de dominación y dependencia.
3. Fomentar el cambio de las relaciones de género formando al alumnado en la autonomía personal.
4. Corregir el desequilibro existente entre profesoras y profesores en actividades y responsabilidades escolares de tal modo que se ofrezca a niños y niñas y jóvenes modelos de actuación diversos, equipotentes y no estereotipados.

Para asegurar el éxito de este Plan es necesario definir y poner en marcha mecanismos de seguimiento de las actuaciones y medidas que lo desarrollan, a la vez que estrategias de evaluación que permitan valorar de una manera sistemática y rigurosa el alcance real de dichas actuaciones y ofrecer información relevante para orientar la toma de decisiones de cara a potenciar los logros y a corregir las posibles disfunciones. Se tiene que hacer una evaluación, que debe de contestar ha: el grado de consecución de los objetivos, la eficacia de la difusión, coordinación y variables que intervienen en ellos… La evaluación es una reflexión de lo que va ocurriendo individual y también colectivo.